Dios no impone reglamentos, El nos da dirección y principios para las decisiones que debemos tomar. Es glorificado cuando contamos con El. Confía y Obedécele, eso lo que El espera de nosotros. Santiago dice: "Si a alguno de ustedes le falta sabiduría, pídasela a Dios, y él se la dará, pues Dios da a todos generosamente sin menospreciar a nadie" (Santiago 1:5 NVI).
Cuando aproveches la sabiduría de Dios, empezaras a vivir de verdad. Vas a ver como todo te va cuadrando en tu vida. Con la sabiduría de Dios ya no sentirás miedo, ni los problemas, ni las opiniones de los demás. Podemos pasar por un trago amargo y vamos a permanecer en Dios. Podemos subir a la cima del éxito, y le podremos hacer frente igualmente bien.
La sabiduría de Dios nos equilibra, la comprensión y la estabilidad. No es porque seamos cristianos que vamos a obtener sabiduría, debes pedírsela a Dios para recibirla. Así tendremos el sexto sentido espiritual, necesario en momentos difíciles, y también la fuerza para echar adelante, a pesar de las preguntas que no te has podido contestar.
Dios dijo: "te daré palabras y sabiduría, ninguno de sus adversarios podrá contradecirles"(Lucas 21:15). Todo esto es parte del paquete que Dios tiene para ti.
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